Por qué hay que descarbonizar el motor de nuestro coche
Actualmente se ha conseguido reducir la contaminación de los vehículos, pero estos siguen produciendo emisión de gases al medio ambiente.
Dichas impurezas afectan a los propios vehículos perjudicando su funcionamiento. Por ese motivo es aconsejable descarbonizar la cámara de combustión y evacuación del vehículo. Para llevar a cabo este proceso, se utiliza gas oxihidrógeno, que permite eliminar la carbonilla.
Esta limpieza es conveniente hacerla de inicio a los 60.000 kms. Y posteriormente en cada revisión o una vez al año para evitar que se acumulen los residuos. Ya que si no pueden empezar a surgir síntomas. Así, por ejemplo, cuando los conductos están obstruidos, la entrada y salida de aire disminuye y no deja que la recuperación o aceleración del coche sea la correcta.
A esto añadimos el hecho de que al haber una mala combustión, haya un aumento del consumo. Ya que al estar obstruidos los conductos de admisión y escape, se inyecta más oxígeno y la centralita ordena quemar más combustible. Todo ello, es importante tenerlo en cuenta porque puede provocar que el vehículo no pase la ITV por superar los límites de emisiones de CO2 permitidos.
Para descarbonizar el motor se debe acoplar el coche a una máquina descarbonizadora que lleva el gas orto-oxihidrógeno. El gas que genera la máquina se inserta por la admisión, se aspira por el filtro y pasa por los tubos y las piezas ubicadas antes que a la cámara de combustión, sin tener ningún efecto, ya que su eficiencia comienza al ser combustionado.
En la cámara, el gas aumenta la temperatura y el calor se concentra dentro quemando los residuos de bujías, cabeza de pistón, cabezas de inyectores, etc. Sin embargo, gracias al efecto del gas orto-oxihidrógeno los metales del motor no se calientan.